¿PORQUE EL GATO NO LADRA, NI LA GALLINA MUGE?

¿PORQUE EL GATO NO LADRA, NI LA GALLINA MUGE?

Es la ley de la vida, que en ella están los códigos genéticos, los cuales están programados en su DNA.

Lo mismo es en nosotros, tenemos una forma de comunicarnos, integrada en nuestros códigos genéticos y nos impusieron un lenguaje articulado, que casi no puede expresar nada.

Por eso los niños no nacen hablando, los ensenamos a hablar, ellos emiten sonidos y se comunican de otro modo.

Me he preguntado ¿Cómo se comunican las plantas, los arboles? Es por medio de energía y vibraciones.

Los animales emiten sonidos, pero no es toda su forma de comunicación, ellos usan rituales, despliegues, olores, marcas, y muchas otras cosas más, no se limitan a sonidos como nosotros, que no los podemos definir, como los sentimientos.

Tenemos que admitir que somos seres de niveles superiores, viviendo en un nivel muy por debajo del nuestro.

Por eso nos expresamos por un cuerpo, ropaje muy difícil y cansado.

Los Seres que no son de acá, me han dado quejas de que es muy difícil para ellos vivir acá, pues se sienten aprisionados como en una armadura de hierro, mirando por dos agujeros.

Uno no se da cuenta cuan difícil es andar en este plano, pues lo hemos dado por sentado que es así y no lo es.

Hay otro nivel que no necesita el cuerpo, ni lenguaje, que se le llama el nivel Astral, pues no tiene impedimentos físicos y está en el nivel más allá de las distancias y los obstáculos, pues es andar en el cuerpo verdadero sin necesidad del cuerpo físico.

La comunicación y la percepción son totalmente diferentes y en ese plano es invisible a los seres humanos corpóreos.

Luego hay otro nivel más sutil, ya es el nivel no visible y sin ningún cuerpo como lo conocemos y se puede conectar con todo lo que tiene vida y aun comunicarse sin necesidad de comunicación como se conoce acá.

Este nivel lo llaman el mundo increado.

Este mundo increado es nuestro mundo, nuestra matriz. Allí esta nuestra esencia, nuestra genética, nuestra vida misma.

Somos ingenieros genéticos que tenemos que donar nuestra energía en la genética de un mundo en evolución y dando nuestras vidas misma, nuestro ejemplo y trabajo, contribuimos en un vivir mejor.

Hemos dejado descendencia, seres vivos de calidad y estirpe elevada
y en nuestra genética corre la Luz – Or, nuestro verdadero cuerpo, no corre la sangre ni aun la energía, pues la energía es de estos mundos aun en desarrollo, por nuestro verdadero cuerpo corre la Luz Esperma Divina.

En términos laicos somos Dioses que hemos venido a marcar nuestra identidad para el mejoramiento humano, como otros lo han hecho en el pasado.

Por eso la calidad humana se elevara aún más, al mismo borde de los mundos incorpóreos.

Nuestra genética se ha impregnado en este nivel y la Luz – Or está saliendo en el comportarse y el pensar de las razas.

Dr. Pedro Ortiz. El Maestro.

Mensajero de Luz – Evrá.

29 de Agosto del 2013.

Mensajerodeluz.com