EXTRAÑO LA SENCILLEZ
La tecnología nuestra nos está acabando. Aunque la tecnología nos ha ayudado mucho, ha salvado muchas vidas y ha facilitado la comunicación, la educación, el comercio y el turismo.
Tenemos que comprender que ha sido un arma de dos filos.
No estamos capacitados físicamente para alcanzar los adelantos, que más bien son atrasos.
Pues no son los adelantos del mundo venidero – Olam HaBah, sino una falsificación para darnos la impresión de que estamos adelantados.
Antes las distancias eran más cercanas, ahora conllevan todo el globo terráqueo.
Los vecinos eran cercanos, ahora pueden estar a miles de kilómetros.
Extraño el caminar, los animales, la naturaleza, la lluvia. el pasto, el sonido de los insectos, la comida pura, los vegetales cosechados, los arroyuelos, las estaciones, el verdor de la primavera, la siembra, la cosecha.
Ahora todo es artificial, mecánico y aún más por control remoto.
Y sin darnos cuenta estamos volviéndonos adictos y esclavos de la tecnología, ya no pensamos, ahora calculamos, tenemos las respuestas ya a todo (Wireless) inalámbrico y por control remoto e instantáneo como el microondas (microwave).
Extraño que todo antes era tan sencillo.
La tienda de abarrotes, el que despachaba, el mismo nos envolvía los mandados y aun extraño el olor a los productos.
No había (credit cards) tarjetas de crédito, ni bancos, ni cuentas a pagar.
Hoy se vive en una esclavitud, en la cual tenemos que estar presionados por la economía, la política, la delincuencia, la salud y hay que luchar no solo para vivir, sino más aun para sobrevivir.
Se piensa que la tecnología ha traído adelantos asombrosos, pero no es así.
Ha vencido las distancias, la velocidad, el tiempo, la comunicación, el transporte, de tal manera que nos ha alejado de nuestro círculo y lo ha hecho más extenso.
Ahora la familia no está diseminada en barrios o en distintas ciudades, ahora son continentes.
Se ha perdido el calor familiar, la privacidad, las redes sociales esto nos quita la privacidad.
Las gentes malas usan la tecnología, las redes sociales, la radio la prensa, la política la medicina y todos los medios para perjudicarnos.
Por eso tenemos que caminar y hacer las cosas con mucho juicio, para no ser víctima de esta selva en la que estamos andando.
Antes teníamos una relación simbiótica con los animales, insectos, las plantas, los vecinos amigos, con un mundo natural y vivo que nos cuidaba y consideraba.
Ahora se ha vuelto un mundo de metales, de plástico, de electrónica, de inalámbrica, que produce ruido y radiaciones muy dañinas y esto nos está afectando la salud y el comportamiento, aun la mente y la manera que nos comportamos y nos conectamos con el Universo – Almá.
Este es un mundo lleno de Klipot, difícil de conectarse por ser un mundo creado con materiales hechos no compatibles a nosotros.
¿Qué hacer?
Vamos a tener que ir a nuestros cuerpos internos y así conectarnos con la Luz – Nujra, la energía de la Vida – Jayím.
Vamos a tener que visitar las afueras de la ciudad y reconectarnos con la flora y la fauna, los árboles, con los árboles que nos conectamos son cautivos, son sembrados, los animales enjaulados, prisioneros.
Por eso es necesario, sino podemos hacerlo, por lo menos aprender a conectarnos con el Universo – Almáh usando nuestra Merkaváh y viajar en nuestro interior, pues allí hay Universos, Mundos y así nos conectamos con ellos.
Hay una manera que nos podría ayudar también un poco y es usar la imaginación e imaginarse bosques, ríos, paisajes, animales remansos de paz y así sucesivamente, esto nos puede relajar bastante.
Hay que luchar hasta que llegue el mundo en el que estamos entrando. Un mundo de acuerdo a lo que necesitamos para vivir en paz y en Luz – Nujra y no el mundo artificial que nos han creado.
Dr. Pedro Ortiz. El Maestro Mensajero de Luz – Evrá.
13 de Agosto del 2013.