HAY UN LUGAR DONDE NACE LA MAÑANA

HAY UN LUGAR DONDE NACE LA MAÑANA

Esta fue mi experiencia, después de haber estado tres días muerto.

Estaba en un profundo estado de coma después de mi operación de corazón abierto.

En esta poesía trato de narrar mi experiencia.

Este escrito es en memoria por haberse cumplido dos años de mi operación en Mayo 22 de 2011 y haber podido hacer 2 viajes a Miami, uno a Cuba,  2 a México y de este a Colombia y luego a Venezuela.

Hay un lugar donde nace la mañana
Donde el mal nunca llega
Allí están las almas tempranas
En una completa entrega.

Allí nace el rocío
Y la fuente de la vida
Allí nació el amor mío
Y la sanidad de las heridas.

Acabó de llegar
Estuve allí por tres días
Me quería quedar
Por mucho Que quería.

Una lluvia de ríos
Baja de las montañas
Trayendo el poderío
De la vida y sus entrañas.

Allí esta mí familia
Yo soy de ese lugar
Allí no hay envidias
Ni nada que desear.

Luche con la muerte
Y también con el fuego
Tuve buena suerte
Esto no es un juego.

Luche con la duda
Con el desorden y el dolor
Con la debilidad aguda
Cansancio y el temor.

Perdí el control de todo
Y hasta de mí mismo
Salí de la fuente de lodo
Que esta en los abismos.

Ahora regrese a mí cuerpo adolorido
Para terminar mi labor
Para ayudar a los afligidos
Sumidos en el dolor.

Mi experiencia fue que una parte ascendió y me recibió mi familia Cósmica o del Olam representados en un anciano una señora y una joven.

Entendí que son mis verdaderos padres y una hermana, de donde procedemos los seres de luz.

Me mostraron muchas cosas que no se pueden describir en lenguaje articulado y me ordenaron regresar, pues tenía que terminar mi labor en Eretz.

Se había quedado parte mi ser en el mundo físico, pues solo estaba conectado por el cordón de oro.

Al regresar, sentí el dolor de perder mi libertad y la de mi ser, y perder esa visión total, y la memoria cósmica y entrar a la limitación, entrar a un cuerpo que es como una prisión por ser tan limitado.

Enseguida los enemigos se esfumaron y comencé como un niño a recobrar la memoria del cuerpo que se había borrado.

Y aprender todos los movimientos como un niño.

Ahora entiendo lo que sufre un niño al llegar acá, pues pase el mismo proceso.

Me tomo mucho tiempo el recordar, hablar y caminar. Ahora estoy en funciones completas y dando los primeros pasos para poder terminar mi labor, la que me encargo mi familia.

Bendigo a todos y entiendo el proceso de los seres que aun estamos en Eretz, en función de su desarrollo y su bienvenida a los mundos más avanzados.

26 de Mayo del 2013.

Dr. Pedro R. Ortiz El Maestro Mensajero de luz.

Mensajerodeluz.com