LA TORAH ESTÁ INTEGRADA EN MI VIDA

 

LA TORAH ESTÁ INTEGRADA EN MI VIDA

La luz en la ranura.

En este intrigante experimento, cuando los investigadores observan a una partícula pasar a través de una ranura, esta lo hace como haría una bala disparada desde un cañón. Sin embargo, cuando no se observa, la partícula cambia su comportamiento y lo hace como si fuera una onda.

Entonces entendamos que cuando es algo vivo, hay comportamiento propio y diferentes reacciones.

Toráh es energía – Koaj, es vida – Jayím, y la queremos hacer estática y rígida. Y cuando la haces rígida, sin movimiento le quitas la vida y la haces un cadáver.

La sencilla razón que Toráh, es un ser vivo. Pablo – Rav Shaúl lo comparó con un maestro que nos viene a enseñar a vivir la vida y cuando aprendes ya no necesitas el maestro. Pues ya la sabes vivir.

Toráh es vivencia, experiencia, no es aprendizaje en sí, y el aprendizaje es para la vivencia y esta es la meta de la Toráh. Veamos que la vida en nosotros es Toráh, pues Toráh es vida energía y no está separada de nuestra vida y nuestra energía – Koaj.

Lo bueno y lo malo es eludir las obras preparadas de antemano para que anduvimos en ellas. Como dice Efesios, y precisamente esas obras son Toráh. Y estas obras están integradas en nuestra vida para hacerlas en un vivir y así ejercer la función que debemos realizar.

Por eso la Toráh es un ser vivo, con un comportamiento que reacciona a nuestro punto de observación, por eso la religión está diseñada a neutralizarla y desviarla, a otro rumbo y no hacer lo que debe hacer en nosotros.

Toráh es parte de nosotros y está escrita en nosotros, pero es una entidad viva con carácter, sentimientos y reacciona, respetando los nuestros,  de acuerdo a nuestra reacción ella reacciona.

Este ha sido en parte mi experiencia.

En conclusión. Los lenguajes cambian de acuerdo a como lo percibimos, y este es un buen ejemplo, sobre muchas palabras que se usan en Cuba y en muchas partes del Caribe.

Y esto lo podemos citar en todos los idiomas, como se derivaron las palabras de acuerdo al concepto del que las escucharon y no necesariamente es así, por eso la TORAH interna y vivida no cambia de acuerdo al receptor, sencillamente toma otro rumbo.

La realidad de las palabras.

Esta última porción me las envío mi sobrino Islas de Cuba.

En realidad acá siempre se le ha dicho fufu a todo tipo de vianda machacada hasta hacerla pasta. Hace un tiempo leía que la palabra fufu proviene del lenguaje de los negros africanos que fueron traídos como esclavos y que esa palabra es de ellos y se trasmitió después a las nuevas generaciones que nacieron aquí. Cuando eran traídos en los barcos negreros, casi el alimento exclusivo era el plátano machacado y hecho puré, ya que el plátano y el tomate eran alimentos que daban en las largas travesías, para evitar el escorbuto por falta de vitamina C y otras enfermedades.

El plátano era más fácil de mantener en buen estado que otros productos. Los tripulantes de los barcos, por lo general, eran ingleses y cuando iban a repartir el alimento les decían food, food y ellos asociaron esa palabra al plátano hecho puré, que era casi siempre lo que le daban de comer.

Otra versión de palabras nuestras es la referida a Carajo. Los barcos de velas tenían un palo mayor y en la parte más elevada de este, había un lugar desde donde se podía ver mejor el horizonte, pero era muy molesto estar ahí, debido al esfuerzo para subir y después por el vaivén que hacia el movimiento del barco. A ese lugar se le llamo el carajo y era un castigo para un marinero cuando le ordenaban: vaya al carajo.

Sobre la palabra Guajiro esta la versión, de que cuando la guerra hispano-cubano-norteamericana en 1898, los mambises pelearon bien contra los españoles en las batallas finales antes de la independencia de Cuba y los americanos que estaban en esa guerra asociaban a los mambises con campesinos, por la forma de vestir y al ver su valor les llamaban war’s heros, pero los cubanos al no dominar el idioma ingles tomaron la pronunciación de esa palabra como guajiros y no como “héroes de la guerra”.

Aquí al bus se le llama Guagua y una versión de su origen dice que en los primeros años del pasado siglo, cuando surgió el transporte automotor, una de las primeras compañías de transporte público que hubo en La Habana se llamaba Walter’s Wagons y lo traían rotulado en la parte exterior y las personas al desconocer el inglés o por asociación de las primeras silabas de ambas palabras, WaWa, derivo en guagua.

Bueno, todas estas son versiones por lo que pueden ser así o no y también haber otras sobre el origen de estas palabras que se usan tanto en Cuba.

También está el caso de que se identificaron algunos productos por su nombre comercial y no por el tipo de producto en sí. Entre muchos, este es el caso de Fa y de Luz brillante.

Una fue una marca de detergente y la otra de kerosina o petróleo para cocinar, pero el habla popular definía así el producto. También aquí entraron unos camiones soviéticos que traían el motor con 8 cilindros en V y las gentes lo bautizo como V8, cuando en realidad su nombre es GAZ.

Entendamos que las M palabras varían en cultura y expresión.

Pero la TORAH permanece para siempre. ¿Dónde? En el vivir de sus letras que son los hijos de luz, que contrasta con los hijos de la noche Laila.

Esta siempre tiene el mismo brillo la misma expresión. En el vivir de los hijos de Shalom.

Dr. Pedro Ortiz El Maestro Mensajero de Luz – Evrá.

19 de Setiembre 2013.

Mensajerodeluz.com